Estados Unidos y China alcanzan un acuerdo histórico para reducir drásticamente sus aranceles

En un hito histórico que podría transformar el panorama económico mundial, Estados Unidos y China han llegado a un acuerdo integral para reducir drásticamente los aranceles impuestos durante años de tensiones comerciales.

El anuncio se produjo tras una intensa semana de negociaciones en Ginebra, donde altos funcionarios comerciales de ambos países ultimaron los términos para eliminar o reducir la mayoría de los aranceles sobre bienes valorados en cientos de miles de millones de dólares. El acuerdo se considera el deshielo más significativo en las relaciones económicas entre Estados Unidos y China desde el inicio de la guerra comercial en 2018.

“Esto no es solo una reducción de aranceles, sino un reinicio de las dos economías más grandes del mundo”, declaró la secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen.

Las autoridades chinas coincidieron en esta opinión, afirmando que el acuerdo “allana el camino para el crecimiento mutuo, la estabilidad y la cooperación en la economía global pospandemia”.

El acuerdo incluye:

Suspensión inmediata de nuevos aranceles prevista para el tercer trimestre de 2025.

Reducción gradual de los aranceles existentes durante los próximos 12 meses.

Un mecanismo bilateral para resolver futuras disputas sin que se intensifiquen.

Si bien los mercados reaccionaron positivamente, con el alza de las acciones tanto en Shanghái como en Nueva York, los críticos han expresado su preocupación por la aplicación de la normativa, la protección de la propiedad intelectual y los desequilibrios comerciales a largo plazo.

No obstante, líderes empresariales y analistas acogieron con satisfacción el acuerdo, calificándolo como un paso crucial para revitalizar las cadenas de suministro globales y reducir la presión inflacionaria a nivel mundial.

Esta medida también podría aliviar las tensiones geopolíticas, especialmente dado que ambas naciones siguen compitiendo en tecnología, energía y defensa.